Lo primero que me digo por dentro cuando te veo -joven- es:
- ¡Jo! ¡Quién pudiera ser joven otra vez para aprovechar mejor la vida llenando todas mis horas, haciendo más intensamente el bien a mi alrededor!
Pero luego pienso que si te digo en voz alta, en nombre del Señor, el resto de la palabra: ¡Ven! y tú me contestas como hicieron los primeros amigos de Jesús, y como dice aquel bolero: “Si Tú me dices VEN lo dejo todo”… mi juventud se prolonga en ti.
Por eso me lleno de esperanza al ver a los grupos de jóvenes de mi Parroquia de San José de Almendralejo. V
eo que Jesús es EL SIEMPPRE JOVEN y el único que garantiza nuestra eterna juventud.
Pero si esto es verdad, tengo que terminar al contrario de cómo os decía al principio. Y como estoy convencido de lo que os he escrito después, ahora resulta que me siento joven con vosotros, en Cristo. ¡Qué suerte tenemos de estar en su Iglesia con Él!
Si tú lo ves así, da gracias y pásalo a otros chavales que puedan sentirse ya “un poco viejos”, tristes o vacíos. Diles al oído:
- ¡JO!
_____Colega, ¡VEN! y verás.
_____________________Rebrotarás.
Y seremos más cada día.
Hablo de vosotros a la joven madre María y al joven José, para que os ayuden a crecer -como Jesús- “en edad, en sabiduría y en gracia ante Dios y ante los hombres”. Entonces, crecer no será ir dejando de ser jóvenes sino crecer cada día en juventud, en libertad y en alegría.
Si continuáis, lo veréis por experiencia, como yo lo he aprendido relacionándome con vosotros. Gracias por enseñármelo. Pedid también vosotros por vuestros monitores y por este vuestro párroco y amigo.
______________________Rafael Julián Rey
- ¡Jo! ¡Quién pudiera ser joven otra vez para aprovechar mejor la vida llenando todas mis horas, haciendo más intensamente el bien a mi alrededor!
Pero luego pienso que si te digo en voz alta, en nombre del Señor, el resto de la palabra: ¡Ven! y tú me contestas como hicieron los primeros amigos de Jesús, y como dice aquel bolero: “Si Tú me dices VEN lo dejo todo”… mi juventud se prolonga en ti.
Por eso me lleno de esperanza al ver a los grupos de jóvenes de mi Parroquia de San José de Almendralejo. V
eo que Jesús es EL SIEMPPRE JOVEN y el único que garantiza nuestra eterna juventud.Pero si esto es verdad, tengo que terminar al contrario de cómo os decía al principio. Y como estoy convencido de lo que os he escrito después, ahora resulta que me siento joven con vosotros, en Cristo. ¡Qué suerte tenemos de estar en su Iglesia con Él!
Si tú lo ves así, da gracias y pásalo a otros chavales que puedan sentirse ya “un poco viejos”, tristes o vacíos. Diles al oído:
- ¡JO!
_____Colega, ¡VEN! y verás.
_____________________Rebrotarás.
Y seremos más cada día.
Hablo de vosotros a la joven madre María y al joven José, para que os ayuden a crecer -como Jesús- “en edad, en sabiduría y en gracia ante Dios y ante los hombres”. Entonces, crecer no será ir dejando de ser jóvenes sino crecer cada día en juventud, en libertad y en alegría.
Si continuáis, lo veréis por experiencia, como yo lo he aprendido relacionándome con vosotros. Gracias por enseñármelo. Pedid también vosotros por vuestros monitores y por este vuestro párroco y amigo.
______________________Rafael Julián Rey
